Historia del Go
El Go, conocido como 围棋 (wéiqí) en chino, 囲碁 (igo) en japonés, 바둑 (baduk) en coreano y cờ vây en vietnamita, es un juego de estrategia ancestral para dos jugadores. Originado en China hace más de 2500 años, fue considerado una de las cuatro artes esenciales de la antigua China, según los textos más antiguos que hacen referencia al juego, como las analectas de Confucio.
La dinámica del juego implica la colocación alternativa de piedras blancas y negras en las intersecciones del tablero, con el objetivo de controlar más del 50% del área del tablero, una cuadrícula de 19×19, mediante la creación de perímetros con piedras del mismo color. A pesar de su aparente simplicidad, el Go es uno de los juegos más complejos conocidos.
En 2016, AlphaGo se convirtió en el primer programa de computadora capaz de vencer a un campeón mundial en Go, un hito significativo en el campo de la inteligencia artificial. Este avance llegó casi dos décadas después de que los programas de ajedrez derrotaran a los grandes maestros humanos.
El Go es especialmente popular en Asia Oriental, aunque ha ganado algo de popularidad en otras partes del mundo. Llegó a Europa a través de Japón, donde se le conoce principalmente como Go, del japonés igo. A mediados de 2008, había más de 40 millones de jugadores de Go en el mundo, la mayoría en Asia, y la Federación Internacional de Go cuenta con 74 países miembros.
Origen del go:
El Zuo Zhuan, escrito en el siglo IV a.C., es la referencia escrita más antigua conocida del juego. También se menciona en las Analectas de Confucio y en trabajos de Mencio. En China, el juego era preferido por la aristocracia y se consideraba una de las Cuatro Artes Tradicionales, junto con la caligrafía, la pintura y la interpretación musical.
El Go se introdujo en Corea entre los siglos V y VII d.C., donde se convirtió en un pasatiempo popular entre las clases altas. En Japón, probablemente se introdujo en el siglo VI d.C., y se volvió popular en la Corte Imperial en el siglo VIII.
En Europa, el Go se introdujo lentamente, a diferencia de otros juegos asiáticos como el ajedrez. A finales del siglo XIX, comenzó a ganar popularidad, especialmente después de que el científico alemán Oskar Korschelt escribiera un tratado sobre el juego. En el siglo XX, el Go se expandió con la ayuda de la Asociación de Go de Japón, y en 1996, se jugó por primera vez en el espacio.
La Federación Internacional de Go cuenta con numerosos países miembros y se estima que una gran cantidad de personas en todo el mundo juegan a este juego. En Japón, el juego experimentó un resurgimiento gracias a la influencia del manga y anime «Hikaru no Go».